Reflexión estrategias de aprendizaje

Lo primero que viene a mi mente es la palabra Responsabilidad, de ahí deriva todo lo que debe hacerse para lograr un buen aprendizaje y llegar a cumplir nuestras metas.

 

Tomar la responsabilidad de nuestro propio aprendizaje, esa es la clave. Una vez estando conscientes de ello, podremos iniciar con paso firme para aprender a aprender, siempre con la guía, monitoreo, asesoría y moderación de nuestros docentes. Haciendo uso de todos los recursos que las TICs ponen a nuestro alcance, así también aprovechando la plataforma que tiene la UnADM y la cual pone a nuestra disposición como estudiantes. Teniendo la enorme posibilidad de acceder, mediante las tecnologías o de manera tradicional a todo un acervo de conocimiento plasmado en libros, ya sea en archivos electrónicos o en forma física.

 

Se debe de tomar en cuenta que este es un proceso que, si bien es cierto que comienza con hacernos responsables de nuestro propio aprendizaje, también es cierto que necesitamos una buena planeación, tanto de programación para estudiar, como en general de nuestro tiempo, de todas las actividades que comprenden nuestro día a día. Solamente con una buena base de planeación y con el firme propósito de cumplir con los horarios que nosotros mismos establezcamos, podremos lograrlo. Es de destacar que la UnADM y el sistema de universidad abierta y educación a distancia nos ofrece también esa enorme ventaja; al ser un programa sumamente flexible, cada quien puede programar sus actividades y horarios de la mejor manera para mayor aprovechamiento.

 

Este sistema de aprendizaje exige, aparte de lo ya mencionado, un enorme compromiso de adaptación al uso de los recursos tecnológicos, al modelo educativo, a aprender a ser autogestivos, organizados, a saber planear, investigar, analizar, evaluar, concluir, así como cooperar, participar, trabajar en colaboración con los demás estudiantes. También es de suma importancia saber leer, saber extraer ideas, conceptos, etc., de los textos, saber extraer lo más importante. Y no menos importante es la adecuada exposición de todo ello de manera escrita, saber redactar, tomando siempre en cuenta las reglas de redacción y de ortografía.

 

Esto es lo que puedo destacar de este sistema que tenemos por delante, viéndolo como una meta, primeramente, y como un desafío para hacerlo de la mejor manera.